Carlos lleva 12 años trabajando en la posta de salud de Nuevo Trujillo. La situación geográfica aislada del pueblo hacía su trabajo muy difícil al principio. La conectividad era una necesidad vital. Antes de tener las nuevas rutas habilitadas y medios de comunicación como la línea telefónica, cuando alguien tenía una emergencia tenían que llamar a toda la población con un altoparlante para pedir ayuda. Entre varios transportaban al enfermo a pie hasta Puerto Bermúdez, desde donde llamaban a Juanjuí (la ciudad más cerca) para que la ambulancia lo fuera a buscar. Muchas veces surgían complicaciones en el camino y a veces, era demasiado tarde. Ahora cuando alguien lo necesita, pueden llamar directamente a la ambulancia desde Nuevo Trujillo y todo el proceso es mucho más rápido.